La fotografía es algo muy bonito. Para unos puede ser un hobby, pero para otros también puede ser una bella y gratificante profesión. Es un mundo lleno de posibilidades en el que cada uno aporta un punto de vista diferente en base a sus conocimientos.
Trabajar como fotógrafo puede ser muy intimidante, especialmente al principio. Por lo general no estás seguro de qué hacer, cómo hacerlo o incluso si te pagarán, pero no te preocupes, este artículo del blog es para las personas que quieren ganar dinero con su cámara pero no tienen ni idea de por dónde empezar.
Aquí tienes una breve guía sobre cómo puedes realizar tus primeros trabajos de fotografía y ganar dinero en el proceso:
¿Qué clase de fotógrafo quieres ser?
Lo primero de todo: tienes que realizar una búsqueda para saber qué tipo de fotos vas a hacer. Y con «búsqueda» no me refiero a que lo hagas en google, sino que mires en tu interior.
¿Qué tipo de fotos te hacen feliz?
Es posible que todavía no estés preparado para responder a ello, pero lo que sí está claro es una cosa: Cuanto antes seas capaz de hacerlo, antes llegarás a tu objetivo.
Esto determinará el tipo de trabajos de fotografía a los que podrás optar y también el equipo que necesitarás, lo cual te llevará a invertir tu dinero inteligentemente.
Investiga un poco sobre los distintos tipos de fotografía y mira cuál se adapta mejor a tus intereses. Evidente, este es uno de los requisitos imprescindibles si quieres empezar a trabajar como fotógrafo y no darte de bruces más adelante.
Llegados a este punto podrás empezar tu camino mediante dos vías:
- Trabajar como fotógrafo freelance
- Trabajar como fotógrafo por cuenta ajena
Todo lo que voy a contarte de ahora en adelante lo hago teniendo en cuenta que decidas hacer fotos por cuenta propia y convertirte en freelance para ejercer esta profesión.
Analiza la competencia
Una de las ventajas del mundo de la fotografía es que todos hablamos el mismo idioma, así que encontrarás miles de puntos de vista diferentes.
Alguna de las técnicas más importantes que debes hacer antes de aceptar tu primer trabajo de fotografía es analizar la competencia:
- ¿Cuánto cobran otros fotógrafos de tu zona por un trabajo similar?
- ¿Cómo son sus carteras?
- ¿Qué uso le dan a su equipo?
Si investigas por adelantado, podrás hacerte una mejor idea de cómo es el mercado y de cuánto deberías cobrar. Esto también te ayudará a distinguirte de la competencia y a atraer más clientes.
En este punto tendrás que tomar una decisión muy importante para tu futuro:
- Diferenciarte por precio
- Diferenciarte por calidad
Aunque ambas opciones son igual de válidas, escoger el tipo diferenciador hará que te ahorres muchos dolores de cabeza más adelante, ya sea por un motivo u otro.
¿Qué perfil se adapta mejor a ti?
Por supuesto, si estás empezando tendrás que mantener un precio bajo para captar clientes, pero con estrategia es sólo cuestión de tiempo que alcances tu objetivo.
Con el paso del tiempo irás viendo cosas en tus servicios fotográficos que se pueden corregir, mejorar, implementar o incluso eliminar de tu dinámica.
Ahora no te preocupes por esto para hacer tu primer trabajo fotográfico, pero tenlo muy en cuenta.
Fija tus tarifas
A continuación, define tus tarifas como fotógrafo. Esto te ayudará a calibrar la cantidad de trabajo que debes asumir y a asegurarte de que te pagan lo que vales. Al definir tus tarifas, ten en cuenta lo siguiente:
- La cantidad de tiempo que te llevará completar el trabajo
- Tu nivel de experiencia
- El tipo de fotografía que vas a realizar
- La ubicación
- El equipo necesario
Hay muchos factores diferentes que intervienen en la fijación de precios de un trabajo, así que asegúrate de investigar primero y establecer una tarifa que funcione tanto para ti como para el cliente.
Una vez que hayas fijado tus tarifas, asegúrate de respetarlas.
También puedes hacer uso de algunas técnicas de marketing como ofertas, promociones y descuentos, entre muchas otras opciones. Si de lo que se trata es de empezar, hacer uso de ellas puede jugar a tu favor inicialmente.
Úsalas con precaución, ya que deben tratarse como algo puntual, y no de uso recurrente.
Necesitas visibilidad
Encuentra algunos clientes potenciales, o lo que es lo mismo: Cuenta con diferentes opciones. Puede ser a través de marketing por referencias, de páginas laborales o de redes sociales como Instagram.
Una vez que hayas encontrado algunos, acércate, preséntate y hazles saber qué servicios ofreces y facilítales tus tarifas.
Si están interesados, cierra una reunión para seguir hablando del proyecto y cumple con la fecha y la hora. Prepárate para mostrarles tu cartera y ejemplos de tu trabajo.
Si todo parece bien, ¡empieza a trabajar en el proyecto!
Trabaja en el proyecto
Una vez que tengas unos cuantos clientes, es hora de empezar a trabajar:
Crea una lista de tomas
Esto variará en función del tipo de trabajo fotográfico que tengas, pero normalmente querrás empezar creando una lista de tomas. Se trata de una lista de todas las tomas que piensas hacer durante la sesión. Puede ser útil crear listas diferentes para distintos tipos de sesiones (por ejemplo, retratos familiares, fotos de productos, etc.), para estar preparado para todo.
Busca localizaciones
A continuación, busca un lugar. Puede que el cliente te lo facilite o no, así que es importante ser flexible en este aspecto.
Una vez que hayas encontrado el lugar, haz una prueba y asegúrate de que todo está preparado como quieres antes de que tenga lugar la sesión real.
Haz el trabajo
Por último, ¡dispara! Asegúrate de que te tomas tu tiempo y capturas las mejores fotos posibles. Si hay algún problema o inconveniente durante la sesión, asegúrate de solucionarlo inmediatamente.
Edita las fotos
Una vez terminada la sesión, es el momento de editar las fotos.
Esto puede ser un proceso largo, así que asegúrate de reservar el tiempo suficiente para hacerlo correctamente. Una vez editadas, expórtalas y envíalas a tus clientes.
Y ya está. Acabas de realizar tu primer trabajo de fotografía. ¡Enhorabuena!
Reflexiona
Debes reflexionar en tus primeros trabajos sobre tus púntos débiles y trabajes para corregirlos. Al fin y al cabo, ¡de los errores se aprende si uno quiere!
Este punto me parece especialmente importante para subir al siguiente nivel. Al fin y al cabo, si quieres trabajar como fotógrafo no habrá otra forma de ascender que no sea mediante la escucha activa, tanto la tuya propia como la de tus clientes.
Sólo de esta forma conseguirás la información que necesitas para perfeccionar los diferentes conocimientos que necesites en edición, marketing o cualquiera de las cosas que quieras mejorar.
Pide recomendaciones
Cuando hayas realizado algunos trabajos, siempre es un buen momento para pedir referencias a tus clientes. Esto puede ayudarte a conseguir más negocio y atraer a nuevos clientes para que puedan valorarte como una de sus opciones o incluso contratarte directamente.
Ten en cuenta que esto también puede arruinarte completamente si no has reflexionado previamente sobre las cosas a mejorar. No vas a querer recomendaciones negativas, ¿verdad?
Conclusión
Si la fotografía es algo que te interesa o si es una profesión en la que te ves trabajando dentro de unos años, espero que estas técnicas iniciales te ayuden en tu camino. Se necesita algo de trabajo y tiempo para tener éxito, pero con perseverancia y dedicación, ¡el éxito es inevitable!
Si buscas más consejos sobre cómo empezar en el mundo de la fotografía o no tienes la experiencia profesional necesaria, no dejes de consultar otros artículos del blog o ponte en contacto conmigo para que pueda asesorarte. ¡Me encantaría ayudarte!
Consejos para los principiantes
- Defínelo todo desde un principio para evitar confusiones más tarde. Si quieres llegar a ser un fotógrafo profesional, actúa como un verdadero profesional. Asume los errores que hayas podido cometer, analízalos, soluciónalos y procura no volver a cometerlos.
- Sé paciente y tómate tu tiempo mientras disparas; las fotos apresuradas se notarán en el producto final.
- Comunícate con tu cliente a lo largo de todo el proceso; de este modo, se puede abordar cualquier problema.
- ¡La práctica hace la perfección! Cuanto más dispares, mejores serán tus fotos y cuantos más errores cometas, ¡más aprenderás!
Y tú, ¿en qué parte del proceso te encuentras?
Házmelo saber dejando un comentario debajo de esta entrada. ¡Me hace mucha ilusión leer y poder ayudaros! 🙂